Pensamiento Para El Día

Hoy centraré mis pensamientos en la palabra de Dios y no en mis preocupaciones.

Leer Isaías 26:3-8

Tú guardas en completa paz
a quien siempre piensa en ti
y pone en ti su confianza.

Isaías 26:3 (RVC)

Me presioné a mí misma a corre la bicicleta más allá de lo que hubiese intentado anteriormente. Por delante se sumaban caminos en zigzag, rocas filosas, pasos angostos entre árboles, subidas y bajadas abruptas. Apenas superaba un obstáculo cuando aparecía el siguiente. ¿En qué me había metido?

Afortunadamente, iba delante de mí un guía experimentado. Me avisaba lo que se avecinaba y me aconsejaba sobre cómo enfrentar cada desafío. Llegado un punto, me comentó sobre el «concentrarse en la meta», algo de lo que no había oído hablar.

Explicó que nuestros cuerpos gravitan entre dos puntos focales. Si fijo los ojos en la roca en el camino, es muy probable que choque con ella y salga expulsada de la bicicleta. Pero si me concentro más adelante en el sendero, consciente de la roca, pero sin mirarla directamente, podría enfrentarla sin problemas. Después de un rato comencé a comprenderlo. En lugar de acercarme nerviosa a un paso estrecho, me forcé a echar un vistazo más allá. ¡Pasé sin dificultades y celebré con un grito de alegría!

Las escrituras nos hablan de mantener nuestro enfoque en Dios y no en los problemas – mejor dicho, que hecho. Pero, el Señor nos promete paz si ocupamos nuestras mentes en sus verdades y no en preocupaciones. Los problemas de la vida siguen aún, pero Dios nos da esperanzas y fortaleza para enfrentarlos.

Oración:

Señor misericordioso, ayúdanos a recordar tus promesas y aferrar4nos a ellas. Ocupa nuestras mentes con tu verdad de modo que podamos vivir tu paz. Amén.

Sra. Lee Ann Zanon (Oregón, EE. UU.)

Oremos: POR QUIENES LUCHAN CON LAS PREOCUPACIONES