Un lugar para crecer

TEXTO BIBLICO

2 Timoteo 1-9: Quien nos salvó y llamó con llamamiento santo, no conforme a nuestras obras, sino según el propósito suyo y la gracia que nos fue dada en Cristo Jesús antes de los tiempos de los siglos.

Edición Reina – Valera en español 1960

 

INTRODUCCIÓN: Hay temas pertinentes de los cuales la iglesia no puede dejar de hablar. El llamado y la misión son dos de los más importantes. Un creyente que sólo busca reconocimientos y descuida su responsabilidad como hijo de Dios, no ha comprendido su razón de ser sobre esta tierra. La doctrina sin el servicio, es conocimiento vacío (1 Co. 8:1). Debemos aprender a vivir en Cristo, debemos conocer las doctrinas fundamentales de la Biblia, pero también debemos conocer nuestro llamado y propósito de parte de Dios. Una iglesia conocedora del valor y la pertinencia de su llamamiento y misión, es una iglesia arrolladora, impactante, que cumple su cometido eternal. Cada creyente debe encontrar su lugar en la gran obra del Señor, realizar su tarea con diligencia absoluta y disfrutar la experiencia de un sacerdocio santo, a la luz del Nuevo Pacto.

CONTEXTO BIBLÍCO: Dios nos llama a todos a ser salvos, a vivir vidas santas, a ser útiles a los demás y a ocuparnos en otras muchas áreas que son comunes para todos los creyentes. Sin embargo, existe un llamado específico para cada cristiano, que tiene que ver muy particularmente con los planes de Dios para esa persona. Descubrir ese llamado personal y vivir para cumplirlo, es una de las más agradables tareas que le ha sido dada a un hombre o una mujer. Veamos algunas de las características del llamado de Dios para poder discernirlo en nuestras vidas.

CONTEXTO PARA HOY: Corren tiempos finales para la iglesia. La inminente venida de Cristo está a las puertas, por lo que debemos apresurarnos con la cosecha. Los campos están listos y Dios sigue llamando a los que quieren trabajar por y para él. Aceptemos el llamado, involucrémonos en la misión. Sirvamos a Dios con un espíritu renovado.

Queridos hermanos/ as, amigos/as, compañeros/as Dios está llamando al pueblo santo a un servicio de proporciones sobrenaturales, pero éste debe responder con valentía a la voz del Señor. No hay atajos, ni caminos fáciles, la misión es difícil y los desafíos que aguardan en el camino son formidables, más nuestro Dios estará con nosotros. No habrá dificultad que nos pueda vencer, si asidos de la gracia de Dios marchamos.

 DEPARTAMENTO DE EDUCACIÓN CRISTIANA Y CAPELLANÍA. Atricia Figueroa Sepúlveda.